Nutricosm�tica

Con una larga trayectoria en la medicina ayurv�dica, la ashwagandha (Withania somnifera) se ha posicionado en los �ltimos a�os como uno de los adapt�genos m�s relevantes dentro del sector de la salud y el bienestar, especialmente por sus beneficios en el �mbito del rendimiento deportivo, el control del estr�s y el fortalecimiento inmunol�gico. Desde la perspectiva del profesional de la est�tica, la incorporaci�n de este tipo de activos dentro de protocolos de belleza integrativa permite abordar el cuidado del cliente de forma hol�stica, potenciando tanto los resultados visibles como el equilibrio interno.

La ashwagandha es una planta medicinal originaria de la India, ampliamente utilizada en la medicina tradicional ayurv�dica. Su uso ancestral est� respaldado por una s�lida base emp�rica y, en las �ltimas d�cadas, por estudios cient�ficos que han demostrado su potencial terap�utico. Entre sus beneficios destacan:

Reducci�n del estr�s y la ansiedad.

• Aumento de la energ�a f�sica y la concentraci�n.
• Mejora del sistema inmunol�gico.
• Regulaci�n hormonal y apoyo al equilibrio emocional.
• Reducci�n de la inflamaci�n y la fatiga muscular.

Estos efectos la convierten en un excelente coadyuvante para tratamientos est�ticos integrales, especialmente en programas de adelgazamiento, antienvejecimiento, cuidado capilar o bienestar digestivo y emocional.

La medicina ayurv�dica, cuyo nombre proviene del s�nscrito y significa �ciencia de la vida�, forma parte de la estructura sanitaria de la India, con un Ministerio propio (AYUSH) dedicado a promover estas terapias tradicionales en combinaci�n con la medicina moderna. Este enfoque reconoce que la salud integral incluye equilibrio f�sico, mental y energ�tico, algo que cada vez m�s profesionales de la est�tica est�n integrando en sus consultas.

Los efectos de la ashwagandha se deben a su riqueza en withan�lidos, alcaloides y lactonas esteroides, compuestos que poseen actividad antioxidante, antiinflamatoria, ansiol�tica y adapt�gena. Los withan�lidos, en particular, son responsables de sus efectos m�s relevantes y deben aparecer claramente estandarizados en los suplementos de calidad.

Para los profesionales que acompa�an a sus clientes en procesos de transformaci�n corporal o mejora del rendimiento f�sico, la ashwagandha puede ser un excelente aliado. Entre sus aplicaciones m�s destacadas en el �mbito est�tico y deportivo se encuentran:

• Reducci�n del estr�s oxidativo, clave en el envejecimiento prematuro de la piel.
• Mejora del tono vital en clientes con fatiga cr�nica o estr�s prolongado.
• Apoyo en tratamientos de celulitis o remodelaci�n corporal, gracias a su capacidad para reducir el cortisol.
• Aceleraci�n de la recuperaci�n muscular y disminuci�n de la inflamaci�n posejercicio.
• Contribuci�n a la regulaci�n hormonal, especialmente en etapas de perimenopausia o alteraciones del ciclo.

Suplemento de Ashwagandha de Weider.

La dosis habitual se sit�a entre 300 y 600 mg diarios, aunque puede variar seg�n el formato (polvo, extracto seco, c�psulas o gominolas). Se recomienda siempre optar por productos certificados, con origen y pureza garantizada, y evitar aquellos que no especifican la concentraci�n de withan�lidos. Asimismo, es imprescindible tener en cuenta posibles interacciones con medicamentos, especialmente en casos de diabetes o hipertensi�n, por lo que debe recomendarse siempre bajo orientaci�n profesional.

Uno de los extractos m�s reconocidos es el KSM-66, elaborado a partir de la ra�z de la planta y estandarizado al 5 % de withan�lidos, garantizando eficacia y seguridad. Esta f�rmula, avalada por estrictos an�lisis de laboratorio, se combina en algunos suplementos con vitamina C, lo que potencia su acci�n frente al estr�s oxidativo y mejora la respuesta del sistema nervioso.

En formatos como las gominolas veganas sin gluten ni az�cares, esta planta se presenta de forma agradable, pr�ctica y con excelente tolerancia digestiva. Cada dosis (dos gominolas al d�a) aporta 300 mg de ashwagandha, ideal para rutinas de mantenimiento o refuerzo puntual.

Fuente: Dr. Alberto Sacrist�n.